¿Cómo cerrar una empresa con deudas?
Cerrar una sociedad limitada con deudas puede parecer una tarea complicada, pero existen diversas vías que permiten llevar a cabo este proceso de forma eficiente. A continuación, te explicamos las opciones disponibles para cerrar una empresa con deudas y los pasos necesarios.
Opciones para cerrar una sociedad con deudas
1. Compraventa de la sociedad
La venta de la sociedad es la solución más rápida y eficaz si se desea transferir la propiedad a otra persona o empresa. Esta opción permite a los antiguos propietarios desvincularse de las responsabilidades de la empresa, sin necesidad de entrar en procesos largos y costosos.
2. Liquidación de la sociedad
La liquidación implica el cese definitivo de la actividad de la empresa y el pago de las deudas pendientes a acreedores, la Administración, entre otros. Este proceso puede ser más largo y complicado, pero garantiza un cierre formal de la sociedad.
3. Solicitud de concurso de acreedores
Cuando una empresa se encuentra en situación de insolvencia y no puede hacer frente a sus deudas, la única salida legal puede ser el concurso de acreedores. Este proceso se solicita en el Juzgado de lo Mercantil, aunque también puede ser instado por los propios acreedores.
Pasos para disolver una sociedad limitada
El proceso de disolución de una sociedad limitada consta de tres fases: disolución, liquidación y extinción. A continuación, detallamos cada uno de estos pasos.
1. Disolución de una sociedad
Para iniciar la disolución, es necesario convocar una Junta General donde se acuerde formalmente la disolución. Además, se debe nombrar a los liquidadores de la sociedad, que generalmente son los mismos administradores de la empresa.
La disolución debe quedar registrada en escritura pública e inscrita en el Registro Mercantil. Aunque la sociedad se disuelva, la extinción no se formaliza hasta completar la fase de liquidación.
Motivos para disolver una sociedad
Según el Real Decreto Legislativo 1/2010, de 2 de julio, las causas para disolver una sociedad incluyen:
- Cese en la actividad empresarial por más de un año.
- Conclusión del objeto social.
- Imposibilidad de alcanzar los fines sociales.
- Paralización de los órganos de la sociedad.
- Pérdidas que reduzcan el patrimonio neto a menos de la mitad del capital social.
- Reducción del capital social por debajo del mínimo legal.
- Otras causas especificadas en los estatutos.
2. Liquidación de la sociedad
En la fase de liquidación, se añade la mención «en liquidación» al nombre de la sociedad, y cesan las funciones de los administradores, que son reemplazados por los liquidadores. Estos últimos se encargan de:
- Preparar un inventario y balance de la sociedad.
- Presentar el Impuesto de Sociedades y las cuentas anuales.
- Darse de baja en Hacienda.
- Enajenar los bienes y continuar, si fuera necesario, con la actividad para pagar las deudas.
El proceso concluye con la elaboración del balance final de liquidación y la distribución de los bienes restantes entre los socios, lo que podría estar sujeto a IVA si el reparto no es monetario.
3. Extinción de la sociedad
El último paso es la extinción de la sociedad. Esto implica:
- Escritura pública de extinción.
- Cancelación de los asientos registrales en el Registro Mercantil.
Con este paso, la sociedad dejará de existir jurídicamente.
¿Cuánto cuesta disolver una sociedad?
El coste de disolver una sociedad depende de diversos factores, como el tamaño de la empresa, el número de administradores y la situación financiera. Sin embargo, todos los procesos de disolución conllevan una serie de gastos fijos:
1. Gastos de notaría
Es necesario acudir a un notario para elevar el acuerdo de disolución a escritura pública. Este trámite tiene un coste aproximado de 300 €, aunque puede variar según el número de folios.
2. Inscripción en el Registro Mercantil
La disolución debe inscribirse en el Registro Mercantil, lo cual tiene un coste de aproximadamente 200 €, dependiendo del número de administradores.
3. Impuestos asociados
- Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados: Un 1% sobre la cuota de liquidación repartida entre los socios.
- Impuesto sobre Sociedades: Si se entregan bienes a los socios, se deberá tributar el 25% de la diferencia entre el valor de mercado y el contable.
- IVA: Se aplicará en caso de transmisiones de bienes de naturaleza no dineraria.
- IRPF: Los socios deberán tributar por la diferencia entre el valor de mercado de los bienes recibidos y el valor de adquisición de sus acciones.
Disolución de una sociedad por insolvencia
Cuando la empresa es insolvente y no puede cumplir con sus deudas, la opción más adecuada puede ser solicitar el concurso de acreedores. Aunque esta vía es más costosa, ya que requiere la intervención de abogados y procuradores, es necesaria para proteger los intereses de los acreedores y liquidar la sociedad de forma ordenada.